[box]Luchador y con carácter en la cancha y cercano fuera de ella, trata de mostrar siempre actitud en cada partido disputado, y dice de aprovechar muy bien su físico, más aún que su propio talento si cabe. Hablamos de Joseba iglesias, -32 años-, actualmente jugador del C.B. Santurtzi en la Liga EBA. Mide alrededor de 2 metros y pese a que por la altura todo el mundo podría imaginarle como un pívot, es capaz de moverse sin problema en el resto de posiciones. Dispone de una amplia trayectoria en el baloncesto a nivel nacional. Desde sus inicios en 2001, -en Bilbao Basket y también en el equipo santurtziarra-, pasó luego por las islas Canarias o por ciudades como Castellón, Huesca, Almería y Cáceres antes de reubicarse aquí y aterrizar de nuevo en el Santurtzi desde la pasada temporada. Esta semana Iglesias ha sido el MVP de toda la EBA con una actuación excepcional, hablamos con él sobre la actualidad santurtziarra y su trayectoria.[/box]
Concluida la cuarta jornada en el grupo A de la EBA, el C.B. Santurtzi es segundo en la clasificación con 3 victorias y 1 derrota. Esta última, se produjo el pasado sábado en tierras cántabras frente al Estela, “sin duda uno de los colosos para estar en la pelea por el ascenso junto con el Ardoi o el Pielagos”, como afirma Iglesias. No obstante, pese al tropiezo por 5 puntos (85-80), Joseba anotó 37 de los puntos de su equipo y capturó 9 rebotes, logrando así un 43 de valoración. Preguntado por ello, el bizkaino se ha mostrado alegre, pero obviamente insatisfecho puesto que no consiguieron vencer: “Está claro que un jugador sólo no puede luchar contra todo un equipo que además promete estar arriba. A veces, el simple hecho de despistarte un par de minutos te lleva a perder partidos tontamente”.
La clave estuvo en el tercer cuarto donde encajaron un parcial de 30-12 y quizá en la diferencia notable en cuanto a acierto desde la larga distancia –los cántabros anotaron 10/28 triples-. “Nos faltó un poquito de concentración en ese cuarto. En un partido siempre hay momentos difíciles, y la diferencia entre perder o ganarlos está en saber afrontarlos. Si te mantienes concentrado, no dejando que el rival haga su juego durante más de 2 o 3 minutos puedes tenerlo controlado, pero al fin y al cabo ellos hicieron lo que quisieron y nos resultó muy difícil competir contra eso”, analiza el jugador del equipo morado. Buscando conclusiones positivas, Iglesias destaca la regularidad en los tiros libres y lamenta no haber anotado alguno más que a lo mejor habría supuesto otro signo en el encuentro. Aún así, salieron con buenas sensaciones y se aferró al hecho de que mejor está perder ahora que en meses decisivos como marzo o abril.
Fuera de la jornada, no descarta un ascenso de categoría para esta temporada: “Sabemos que va a estar difícil, pero tenemos un muy buen grupo, en el que todos trabajamos juntos, somos constantes e intentamos mostrar una actitud positiva. Creo que esa es la forma y dinámica para llegar con opciones al final de temporada”.
TROTAMUNDOS DEL BALONCESTO
Por otro lado, Joseba también ha manifestado sus buenos recuerdos vividos en el Bilbao Basket: “Estuve allí tres años. Los dos primeros como convenido y el tercero con la primera plantilla en la que se logró ante el León el ascenso a la ACB. Sinceramente guardo muy buenos recuerdos de Txus y de mis compañeros, como Lucho Fernández y Salgado”.
Con la trayectoria que tiene a sus espaldas, con su gran recorrido en el baloncesto estatal hay muchas ciudades y clubes por los que ha pasado pero Iglesias recuerda con especial cariño dos de ellos: “La Laguna porque fue mi primera vez fuera de casa o Plasencia donde competí en la máxima categoría en la que he jugado”, al margen de ello el ala-pívot del Santurtzi comenta que “es sabido que uno siempre valora las posibilidades que tiene y hasta dónde puede llegar. Personalmente yo salí de casa porque sabía que aquí no iba a tener oportunidad de jugar, en la ACB. Al final lo más alto ha sido LEB plata, y sí que echo de menos igual el haber estado más años en algún sitio en concreto pero por lo demás no me arrepiento de nada”.
