El conjunto senior nacional femenino de La Salle ha teñido de amarillo la 1ª Nacional en esta primera parte de la campaña con 14 victorias y solo una derrota. Un bloque, el de Deusto, que ya realizó una excepcional segunda vuelta la pasada temporada y que se ha reforzado con Ainara Ramasco y Marta Bueso, dos jugadoras de garantías. Todo ello con el sestaotarra Gorka González en el banquillo colegial en su vuelta a las canchas. El técnico y Nerea Vázquez, canterana de La Salle, nos hablan del magnífico equipo bilbaíno que marcha líder y cuya clave es la familia que se ha formado en el vestuario. ¿Quién no lo apuesta ahora todo al amarillo?
Remitiéndonos a la más absoluta actualidad, la victoria del sábado ante Araski es una de las más importantes de los últimos años para el club…
GG: Desde luego que sí. Estamos tres equipos en la cabeza de la tabla pero los que vienen por detrás tienen todos posibilidades de batirnos. Realmente hicimos una semana muy buena entrenando muy bien y es cierto que nuestro equipo compite muy bien. El resultado fue 74-67, no conseguimos llevarnos el average, pero es que 15 puntos era una gran renta… Estuvimos 14 arriba en el primer cuarto, aunque el partido se hizo largo.
NV: Estoy en la línea de lo que dice Gorka. El primer cuarto fue un subidón pero sabíamos que las cosas cambiarían y que no todo iba a ser así y sucedió. Pero supimos mantenernos y nos llevamos el triunfo. Estábamos nerviosas durante la semana, pero hicimos lo que hacemos cada semana y nos concentramos en el trabajo que teníamos que hacer.
Y el ambiente no fue menos que el partido, ¿no?
GG: Yo solo llevo un año aquí en La Salle, pero hacía tiempo que no estaba en un partido con tanta gente, tantos niños… La labor del club en ese sentido fue muy buena. Durante el partido no te das cuenta, pero al terminar adviertes lo increíble de la situación con las pancartas y etc. Ahora tenemos que mantener la calma y seguir para afrontar el siguiente encuentro, que nos enfrentará a Aranguren, un equipo muy competitivo que nos exigirá mucho.
Gorka, remontándonos al verano… ¿Cómo te encuentras al equipo tras el cambio de entrenador? Txutxi Paredes llevaba varios años comandando el equipo.
GG: No vamos a mentir, al principio fue duro a pesar de que Txutxi y yo ya nos conocíamos y de que teníamos ideas similares. Llevo muchos años entrenando pero puedo decir que es uno de los mejores equipos entre semana. Estoy muy contento con ellas, creo que han tenido un gran progreso desde septiembre.
NV: Es verdad que al principio se nos hizo duro. Cuando vino por primera vez a entrenar, Anna y yo pensábamos que no íbamos a aguantar… (risas) Ahora hemos cogido otro ritmo y estamos todas muy contentas.
Entrenaste muchos años a chicas, después chicos, y ahora de vuelta… ¿cómo lo llevas?
GG: No me voy a quejar porque la vuelta está siendo buena. Para los que nos gusta el basket esto es un veneno competitivo que nunca te abandona a pesar de que digas que no varias veces. He parado un par de años porque he tenido a una niña de la que quería disfrutar, y ahora he vuelto, aunque mentiría si digo que no me cuesta compaginar trabajo, familia y baloncesto. Yo he de decir que estoy disfrutando.
El año pasado firmasteis una gran segunda vuelta, y al mantenimiento del bloque le habéis añadido dos piezas que ensamblan un gran equipo, como son Ainara Ramasco y Marta Bueso…
NV: Creo que nuestro equipo se caracteriza porque, además de ser un equipo, somos todas amigas. El ambiente que hay en el vestuario es increíble. Marta vuelve ahora pero ya estuvo con nosotras hace tres años, y yo creo que lo que le ha hecho volver es la gente que estamos. Con Ainara sucede lo mismo, y es que también hacemos muchos más planes extradeportivos todas juntas.
GG: Si el vestuario no funciona, por mucho que lo intentes… Es verdad que ellas están muy unidas, aunque cuando se juntan todas son un poco pesadas… (risas) Tienen una gran capacidad positiva y como grupo es excepcional. La gente del banquillo que no juega mucho salta, grita…. Hacía tiempo que no veía esas cosas en un equipo senior. Si alguien agacha la cabeza, siempre se animan mutuamente…
A nivel deportivo, Marta es una jugadora que viene de jugar arriba y que tiene mucha calidad, aunque llegaba sin confianza, y creo que carente de ilusión, por la falta de minutos. Pero desde hace un mes, está inmensa. Ha estado increíble en los partidos de Promete y Araski; es una jugadora que conoce sus limitaciones y trabaja mucho.
Por otro lado, Ainara comenzó a entrenar con nosotros porque trabaja cerca y yo la conocía de ser de la generación del 89. La verdad que fue súper rápido, no hizo falta empujarla. Nos hemos encontrado con una tía de diez, que viene a entrenar como si fuese cadete y siempre trata de echar una mano, llamando a la gente que está de bajón, por ejemplo. ‘Aina’ es de ‘chapeau’ y se ha adaptado perfectamente.
Vamos ahora con Nerea… Queremos saber más de tu trayectoria, que se ha dilatado íntegramente en La Salle…
NV: Eso es, yo nunca he cambiado de club. Empecé a jugar porque mis amigas del colegio se apuntaron a baloncesto. Ya en el comienzo estuvimos todas juntas, y desde mini hasta junior, donde nos separamos relativamente. Recuerdo que un día ‘Toto’ me propuso ir convocada a jugar con el senior de La Salle. Ya sabía que no iba a jugar mucho, pero acepté, y hasta aquí me ha llevado…
¿De qué personas del club te acuerdas especialmente?
NV: Tengo grandes recuerdos de Tamara, nuestra primera entrenadora, que nos metía mucha caña y eso con nosotras funcionaba. Después se dieron unos años de transición, mejorando poco a poco y ahí coincidí con Adrián Yáñez, con el que tuvimos dos años muy buenos. Luego fue cuando llegó ‘Toto’, con el que yo estuve siete años seguidos, desde infantil hasta senior. Para mí han sido años muy importantes porque es cuando más he aprendido.
¿Ha cambiado mucho el bloque?
NV: Gran parte se mantiene, aunque bien es cierto que, como es lógico, por distintas circunstancias algunas jugadoras que estaban en mis primeros años de senior han dejado de jugar. Pero quedamos algunas de las que empezamos en mini.
Gorka, vamos de nuevo con el apartado deportivo. ¿Cuál era la idea de juego que tenías con el equipo cuando tomaste las riendas?
GG: Al equipo pude verle el año pasado varias veces. Mi idea era tratar de jugar más colectivamente, pensaba que el balón no se movía lo suficiente y que tenía que haber más juego sin balón. Creo que a día de hoy hemos conseguido que suceda, y metemos canastas fáciles por inercia prácticamente. Nos hemos aprendido los movimientos y verdaderamente he seguido el camino que me había marcado al principio, con las dificultades lógicas iniciales. No te digo más que creo que sigo utilizando los mismos sistemas que hace 7-8 años…
La 1ª División Nacional ha subido su nivel y se ha complicado mucho….
GG: Los últimos años ha habido un ‘coco’, que era el Barakaldo que actualmente milita en Liga Femenina 2 y tenía mejor equipo que el resto. Yo no sabía qué nivel íbamos a encontrarnos porque lo que siempre sucede es que hay muchas juniors que pasan a seniors y eso genera sorpresas. A las chicas les dije el primer día que me parecía muy complejo repetir lo realizado la anterior temporada, porque realmente lo pensaba. Hay equipos que están muy bien, como Araski y el CD Promete, con jugadoras en dinámica de Liga Femenina. Por otro lado, creo que la clasificación no está haciendo justicia por el momento para algunos equipos. El ejemplo es el Tabirako, que a mí me gustó mucho y creo que podría estar más arriba y lo va a estar. Gernika también lo hace bien, e incluso Loiola juega muy bien. Lo que hay que comprender es que cualquier equipo de la liga te puede ganar a pesar de que estemos destacados tres conjuntos. Para mí el Campus Promete es el mejor equipo, con un róster muy completo, y los demás tenemos que luchar y aprovechar las dinámicas, y la diferencia es que nosotros pudimos ganar en Logroño..
¿Cómo fue el partido contra las riojanas?
GG: Todo el mundo ha visto la canasta de Ainara, pero no refleja lo que fue el partido. Ellas empezaron bien y se colocaron por delante pero nos recompusimos y estuvimos prácticamente 30 minutos por delante en el marcador. Llegamos siete arriba a falta de cinco minutos y ahí nos entró el canguelo. Al final, defendimos bien y acertamos en la jugada para ganar.
¿Qué creéis que está marcando la diferencia para que las victorias estén llegando?
GG: Creo que la veteranía de tener jugadoras que ya conocen la liga hace que en los finales ajustados estemos resolviendo bien. Ayskel, Ainara, Nerea… jugadoras que dan un poso y se nota.
NV: Estoy de acuerdo, y creo que va en función de la veteranía. Me siento joven con 24 años, pero a veces te enfrentas a gente más joven. Marca la diferencia el saber jugar el minuto final, el no hacer una falta, no perder un balón… Esos aspectos del juego que vas aprendiendo a controlar según pasan los años.
¿Genera mucha presión el hecho de tener que ganar cada fin de semana para estar arriba?
GG: Todos los que nos metemos en este ajo lo hacemos para competir y para ganar. Desde luego que no cansa esa presión, pero lo que sí temo es que el equipo, que no está acostumbrado a estar arriba, se caiga al perder. Ahora estamos muy bien pero yo sé que va a haber momentos peores, en los que nos van a apretar y van a aparecer dudas. Pero ellas lo están consiguiendo todo trabajando mucho y lo que me da confianza es el colectiva. El objetivo es estar centrados siempre en el siguiente partido, y hay que ser conscientes de que tanto nosotros como Araski y Promete podemos pinchar. Que el día a día nos ponga donde nos tenga que poner. Firmaría llegar al último encuentro, en casa contra Promete, jugándonos algo como locales.
NV: Nosotras vamos semana a semana. Hemos ganado a Araski pero esta semana estamos ya centradas en el choque contra Mutilbasket. Ir primeras está muy bien pero no podemos confiarnos.
Iñigo Núñez