La selección de Bizkaia Junior Masculina se ha hecho con el título en el Campeonato de Euskadi y Nafarroa que se ha disputado este fin de semana en el Polideportivo Aritzbatalde. Los bizkainos se medían a Gipuzkoa en la final y desde que en los últimos minutos del primer período han conseguido marcar el ritmo del partido han dominado el mismo con rentas que para el tercer asalto han alcanzado la veintena. Los de Mikel Fernández pudieron romper el choque, no lo hicieron y Gipuzkoa siguió viva pero sin opciones reales de poner en cuestión el triunfo y el campeonato para Bizkaia.
Tardó 2-3 minutos Bizkaia en aterrizar en la final. No era por ganas o intensidad, fue un problema de lecturas, especialmente en defensa a nivel de ayudas y de rebote defensivo. En ataque el error era buscar más soluciones individuales que colectivas. Cuando Mikel Fernández llamó a filas a los suyos éstos entendieron el mensaje y se pusieron el mono de trabajo atrás para crear dificultades a su rival, frenar su producción ofensiva y en ataque el juego más fluido le permitió recortar y situarse 15-13 tras 10 minutos de juego.
Los balones interiores para los pívots bizkainos generaron puntos y situaciones de ventaja que hicieron que para los primeros compases del segundo período los de Mikel Fernández le dieran la vuelta al choque, 17-21. Paternina dentro, el triple de Sardui, la penetración de Bravo y el triple de Gascon llevaban al 23-31, máxima del choque a 4 minutos del descanso. Tiempo muerto de los anfitriones. Pero la escalada siguió Errasti puso el +12. Los rojillos colapsaban cualquier penetración azulona y los triples de Bizkaia hacían el resto ahora con la firma de Errasti y Gascón. Bizkaia estaba imparable y Gipuzkoa lo acusó. Al descanso, 28-45.
En la reanudación la selección bizkaina se manejó entorno a la veintena de diferencia, es más, pudo romper el partido y tener sentenciada la final en este tramo del choque. Pero Gipuzkoa no se rindió, se cometieron errores en los pases y en las selecciones de tiro, no se aprovechó la superioridad interior y los anfitriones llegaron vivos a los 10 minutos finales, 47-64. Los locales no bajaban los brazos, es más aumentaban la intensidad en primeras líneas pero los esfuerzos de los anfitriones no fueron suficientes como para cuestionar el triunfo de Bizkaia.