Una lástima que sumar dos victorias no haya sido suficiente para que los equipos bizkainos hayan podido superar la fase de grupos de los Campeonatos de España Cadete. Unamuno no pudo con Unicaja (84-50) y la victoria del Gernika ante Estudiantes de Lugo no fue lo suficientemente contundente que necesitaba el equipo de la villa foral (64-60).
FEMENINO
El Gernika se despide del Campeonato de España con una victoria ante el Estudiantes de Lugo Leyma Natura. El triunfo por 64 a 60 resultaba insuficiente para pasar a la siguiente ronda porque La Salle Melilla cedió ante Agustinos (55-44) y las gernikarras necesitaban ganar de 29 puntos para alcanzar octavos de final. Las de Josema Alcántara finalizan terceras de grupo en un triple empate en cabeza.
El control del rebote, los buenos porcentajes desde la línea de tres puntos (45%) y el gran partido del trío formado por Nerea Zenigaonandia (12 pts), Marta Alberdi (15 pts) y Aitana Vergara (18 pts), fueron algunas de las claves de la victoria gernikarra en un choque muy equilibrado.
MASCULINO
Era complicada también la gesta que tenía por delante el conjunto que dirige Imanol Adán. Tras dos triunfos, necesitaba también superar al potente Unicaja que había dado dos recitales en sus anteriores encuentros superando en ambos los 90 puntos y no permitiendo que sus rivales llegaran ni a la treintena.
Pese a ello, Unamuno afrontó el envite sin complejos. Un triple de Betolaza permitía el 2-4. Cerró bien la pintura el equipo bilbaíno pero el bombardeo malagueño a base de triples, tres consecutivos, provocó el 14-4. El primer desequilibrio llegó en esos 5 minutos y lo cierto es que sumar en el otro aro era realmente complicado. A Mena no le entraban los triples, a Betolaza se le resistían los tiros libres y al final del primer cuarto un preocupante 23-8. En el segundo parcial ambos equipos acumularon errores pero Mena sí acertó con un par de acciones que daban oxígeno a los suyos y Alonso completaba la secuencia para el 25-15 (min. 12). Se manejó bien Unamuno en este tramo pero no pudo evitar el 42-24 del descanso.
El choque se rompió en el tercer cuarto porque Unamuno no fue capaz de liderar una reacción lo suficientemente importante para cuestionar el triunfo de Unicaja. Sin embargo los bilbaínos no se dejaron llevar en ningún momento y dieron la cara hasta el pitido final (84-50).