El Campeonato de Euskadi y Nafarroa Mini que se disputa en el polideportivo Divino Maestro de Vitoria-Gasteiz ha comenzado de la mejor manera posible para los intereses bizkainos. Las chicas se medían en semifinales a Gipuzkoa y han demostrado dominio de principio a fin, buenas lecturas, gran intensidad…triunfo para las bizkainas (63-37) y pase a la final donde se medirán este domingo a las 16 horas a Nafarroa. También los chicos mostraron ser muy superiores al conjunto azulón tomando la iniciativa desde el primer instante y no dejan a Gipuzkoa cuestionar la victoria bizkaina. En la final, a las 18 horas, el rival también será Nafarroa.
FEMENINO: BIZKAIA 63 – GIPUZKOA 37
Con mucha y muy buena energía arrancó Bizkaia. Velocidad, ritmo y acierto para el 7-0. Ni la superioridad física de la pívot gipuzkoana Lía Arregi evitaba el 9-2 al término del primer período. Mantuvo esa renta Bizkaia, pero no la hizo crecer por las pérdidas, 17-10. La intimidación de Arregi volvió a entrar en juego en el tercer período pero el acierto lejano de las bizkainas incrementaba la distancia al 27-12. Vegueira encontró el camino del aro, Muraru estuvo muy certera y Gipuzkoa no era capaz de transicionar con garantías. Para el descanso, un más que prometedor 33-16.
Mantuvo el orden y la intensidad la selección dirigida por Asier Hormaechea. El partido estaba controlado y los márgenes se ampliaban, 45-18. Dio tiempo a disfrutar a pensar en la final y seguir afinando algunos conceptos. Al final, 63-37.
MASCULINO: BIZKAIA 102 – GIPUZKOA 58
Bizkaia quería mandar en el partido y lo hizo desde el primer momento. Buenas penetraciones, mucha verticalidad y sacando provecho de las recuperaciones, así mandaron en el luminoso en el primer asalto los de Jon Ander Paredes, 19-8. La presión de los bizkainos siguió cobrándose canastas pero cuando los azulones eran capaces de superar la primera línea defensiva conseguían ver aro. El ritmo era de Bizkaia, también la fortaleza física y el 62-28 del descanso era lo suficientemente contundente para asegurarse el pase a la final.
En la segunda mitad, los desajustes defensivos impidieron cerrar el marcador, pero tampoco era el objetivo. Seguir trabajando para mejorar y preparar la final mientras que todos disfrutaban de la victoria.












