[box]Nuestro nuevo invitado a la sección de dirigentes en Ligas Vascas es Gaizka Barea, técnico del Gernika KESB Junior Femenino. Un club que viene realizando un gran trabajo de cantera en los últimos años, siendo probablemente de las mejores de Bizkaia. Además, dispone de Ane Olaeta, que fue noticia en enero cuando debutó en Liga Femenina.[/box]
El conjunto de la villa foral se encuentra quinto en la tabla con 1 victoria y 5 derrotas y se han complicado bastante las opciones de entrar en la F4. Su opción sería alcanzar al cuarto clasificado que actualmente es el Tabirako Baque A con 3-3. Un grupo liderado por Loiola Indautxu con pleno de victorias; segundo el Aranur ISB con 4-2; tercero el Easo DBN también con 4-2 a su favor; cuartas las mencionadas durangarras de Tabirako; quintas las gernikarras y sextas las chicas del Electro Alavesa Araski que aún no han ganado en esta fase.
Gaizka comenta que han tenido bastante mala suerte a pesar de haber competido bien los 6 partidos: «Si no es por una cosa es por otra, ya sea por nuestro poco nivel físico porque es un equipo muy pequeño lo cual nos ha penalizado, o porque no estamos acertadas en momentos determinados para resolver los partidos». Barea resalta además que por encima de todo prima la dedicación al trabajo con las jugadoras: «El primer objetivo que tenemos en el club es que las jugadoras puedan progresar, y si a través de ese proceso se pueden obtener resultados deportivos positivos, mejor que mejor. Hay años que se nos dan mejor y otros peor, no dejamos de pertenecer a un pueblo de 15.000 habitantes. Estamos compitiendo con Easo, que es una selección de Donostialdea y Loiola Indautxu, selección de toda Bizkaia. Debemos ser conscientes de lo que significa estar en A1 y el mérito que tiene que año tras año que equipos de Gernika estén ahí».
En relación al nivel de la categoría Gaizka Barea opina que está siendo más flojo de lo que esperaba. Ha hablado por ejemplo de las alavesas que aún no conocen la victoria, lo que por otra parte ve normal puesto que vienen de abajo y adaptarse al cambio de ritmo siempre cuesta. «Estamos viendo una fase muy irregular», destaca el técnico bizkaino. «Esta liga fuera de casa es muy complicada, primero por la edad de las jugadoras y segundo porque jugar fuera conlleva muchas limitaciones. Hay que tener un equipo muy sólido y entrenar y trabajarlo muy bien a diario».
Respecto a la generación con la que cuentan actualmente, menciona las dos con las que están trabajando en éstos momentos, del 98 y 99. Subraya que el grupo humano es muy bueno, quizá uno de los mejores de los que ha dispuesto. «Se nota cuáles son las de segundo año porque son las que llevan un poco la voz cantante, pero si miramos los números de esta generación hace dos años en Cadetes observamos que existe claramente una mejoría y en ese sentido hemos acortado diferencias con equipos como Loiola o Getxo», declara.
Por último, Barea podría considerar una decepción no acabar la temporada entre los cuatro primeros, pero nunca un fracaso. «Estamos cinco equipos muy parejos, y de ellos uno se va a quedar fuera. En este caso, salvo que hagamos la machada probablemente seamos nosotros. Pero insisto en que el equipo ha trabajado y sigue trabajando bien, solo que en momentos determinados no hemos sabido competir y eso nos ha perjudicado», concluye.