Faltó brillo en la primera jornada de la Fase Final Junior Femenina que se celebra desde este viernes y hasta el domingo en el Polideportivo Errotarena de Balmaseda. Las defensas reinaron y los fallos de cara al aro fueron mayores que los aciertos y de ahí salieron victoriosos Loiola frente al Gernika (35-49), en un encuentro que estuvo equilibrado 25 minutos, y Tabirako ante Escolapios (16-53), en un choque en el que la presión durangarra complicó la existencia a las bilbaínas.
GERNIKA 35 – LOIOLA 49
Arrancó el encuentro con triple de Maider San Miguel del Gernika, defensa zonal de las de la villa foral y Loiola muy fallón. Las gernikarras atacaban de manera cómoda, incluso se hacían con rechaces en ataque, pero se veían intimidadas en las proximidades del aro y eso no dejó que tomaran ciertas rentas. Por su parte Loiola estaba muy errático, perdía balones, su circulación era espesa y cuando conseguía lanzar con garantías, fallaba. Costaba anotar en ambos bandos y de ahí el 5-7 a los 6 minutos de juego. Los tiros exteriores entraron en las filas gernikarras y el de Olatz Irusta a tabla selló el 12-8.
Loiola tenía que cambiar cosas y empezó por la defensa, subiendo líneas, presionando la subida rival y colocándose en zona. Pero Irati Onaindia trabajaba vienen la pintura y eso mantenía al Gernika por delante pese a que las bilbaínas empezaron a anotar de media-larga distancia.
Al Loiola no le interesaba el ritmo que tenía el choque, se encontraba incómodo y sufrió aunque logró irse al descanso con ventaja, 18-20.
El encuentro se retomó convulso con la segunda técnica a Josema Alcántara que dejaba al Gernika sin entrenador el resto del choque. Las jugadoras resolvían espoleadas por la situación incómoda con más corazón que cabeza. El partido se aceleró y descontroló, eso le fue mejor a Loiola pero no sacaba los réditos esperados. Aguantan las gernikarras con 22-25 mediado el período. Las bilbaínas empezaron a abrir brecha poco después cuando la presión de las de Indautxu supuso un par de recuperaciones con sus consiguientes bandejas que sirvieron para abrir camino al 25-35. A partir de ahí, con Loiola controlando el rebote y saliendo al contraataque logró manejarse en estas rentas haciendo inútiles los esfuerzos del Gernika.
ESCOLAPIOS 16 – TABIRAKO 53
Al igual que sucediera en el primer encuentro las defensas fueron las que marcaron la pauta ante ataques que sufrían para encestar. Con ambos equipos desacertados las canastas llegaban con cuentagotas. A los 15 minutos de juego 4-10 y es que ni Ardanza estaba cómoda en la zona 1-3-1 bilbaína ni Escolapios anotaba de fuera y se encontraba intimidado en las penetraciones pese a los esfuerzos de Nerea Espeja. El 4-10 a los 15 minutos de juego era fiel reflejo de lo que estaba ocurriendo en pista. Presionó el Tabirako y ahí sufría el conjunto colegial pero tampoco fue algo determinante. Al descanso, 8-18.
El partido ganaba en emoción cuando en la reanudación del choque un parcial de 6-0 con dos triples de Iuliana Balog situaron el 14-18 en el luminoso a los 23 minutos de juego. Las durangarras no querían un marcador igualado, apretaron en defensa presionando en toda pista, recuperaron balones y finalizaron en cómodas bandejas. Así las cafeteras lograron un parcial de 0-13 en 5 minutos. Sin grandes esfuerzos ni alardes las diferencias se incrementaron a favor del Tabirako que fue más contundente en el último cuarto mientras Escolapios se descomponía en ataque.