Casi era imposible perder con el magnifico ambiente de Landako. Este sábado se jugaba en la cancha durangarra las semifinales de la Fase Previa para lograr una plaza a la Fase de Ascenso de Liga Femenina 2 y había un duelo bizkaino entre el Tabirako y el Leioa. El choque estuvo extraordinariamente equilibrado y en el cara o cruz final el triunfo fue para las cafeteras (56-51). La final será este domingo a las 18 horas ante el Lagunak Lakita.
Aunque la igualdad fue sobrevenida, no inicial. El motivo es que las chicas del Tabirako acusaron la presión y los nervios en los primeros compases. No tardó en aprovecharlo el Leioa y el parcial de salida fue nada menos que un 0-11 con acciones cerca del aro de García que hacían mucho daño a las anfitrionas. Las de José de Vicente estuvieron hasta 7 minutos sin anotar. El triple de Arnedo dio confianza, Urain siguió con la remontada y sus triple,s junto con los de Nuria Maurtua, volteaban el marcador al 23-20 a los 16 minutos de juego. Con mejores ayudas interiores del Tabirako las soluciones ofensivas del Leioa eran los triples de Muñoz y Vega. Pero eran insuficientes porque el parcial en 10 minutos fue de 21-7 para el 28-23 del marcador rondando el descanso. Lo arreglaron las de Luis Ledesma en el último minuto para dejar el 28-27 en el luminoso antes de irse a vestuarios.
Con defensas individuales todo el partido los dos equipos, la diferencia era que el Tabirako subía líneas, defendía en toda pista. Más conservador el Leioa que tenía un banquillo más corto. Ya nadie abría brecha. Las jóvenes marcaban la pauta en las durangarras. Entre Baqué y Ardanza mantuvieron a las suyas en el tercer asalto, tan sólo ellas anotaron hasta que Núria Maurtua sumó un 2+1 casi sobre el bocinazo de final de período. Por su parte, el Leioa le daba la responsabilidad a Tena, y Torres se sumaba a la causa de la capitana de las leioztarras. Con 46-41 arrancaba el último cuarto.
Nervios, muchos entonces, y los errores no forzados de una y otras pesaban. Pero como iba por delante el Tabirako el Leioa era el damnificado. Ledesma paró el partido a 8 minutos del final pero no dio con la tecla para frenar a Ardanza. Sí con la de aclarar ideas en ataque y a base de tiros libres se puso por delante en el luminoso, 48-50 en el último minuto. Una buena combinación entre pívots, Fernández y Ardanza, que culminó la júnior subían el 52-50. Poco después Maurtua pudo sentenciar con una bandeja que no quiso entrar. Lo enmendó la alero local con los tiros libres posteriores y la victoria y el pase a la final fueron para el Tabirako.