(FOTO: Leioa SBT) Tratar de dar cobertura a las competiciones Especiales de Bizkaia en categorías Junior y Cadete, tanto masculinas y femeninas, desde un punto de vista diferente desde el que lo hemos hecho hasta ahora. Queremos que sean los propios entrenadores de los diferentes equipos de cada club los que nos den su visión. A través de un cuestionario simple pero suficiente para acercarnos a su actualidad de cada conjunto y club. Por eso mismo solicitaremos la colaboración de los directores deportivos de cada entidad para poder hacerles llegar estos cuestionarios que se adaptarán en función de la fase de la temporada en la que nos encontremos.

Nuestro cuarto invitado es Igor Urreta, responsable deportivo del Leioa SBT que además está al frente del equipo Junior Especial Masculino del Leioa SBT. Tras vivir las últimas temporadas en el banquillo del Nacional y lograr el ascenso a EBA, donde la temporada pasada no se pudo evitar el descenso, Igor se hace cargo de este equipo Júnior de Especial que milita en el grupo A.

¿Cuál es el objetivo del equipo en esta fase de la temporada?

El objetivo del equipo ha sido mantener la plaza en Especial de cara a la segunda fase e intentar acercarnos a los dos teóricos equipos destinados a jugar cruces de Liga Vasca, en un grupo que pienso es bastante más fuerte que el otro. El primer objetivo ya está cumplido, mientras que el segundo ha quedado a medias, sin realizar malos partidos frente a Tabirako y frente a Getxo en Kandela, pero sin lograr hincarles el diente.

En cualquier caso, el objetivo principal ha sido crear un equipo, un buen grupo, con dos generaciones muy heterogéneas a las que hay que lograr llevar por el mismo camino, aunque sea un camino ancho, pero que se respeten entre ellos, que entiendan la realidad del otro y que generen confianzas unos en otros, que no sean dos mundos separados y a partir de ahí, hacer el mejor basket posible que en cada momento podamos hacer.

¿Quiénes consideras que son tus máximos rivales para alcanzar dichos objetivos?

Los rivales teníamos claro que iban a ser Unamuno y Padura. Frente a Unamuno hemos vencido los dos partidos y frente a Padura cedimos en la prórroga en Kandela. En cualquier caso, y a falta de una jornada, la cuarta (o tercera) plaza está garantizada, por lo que no jugaremos cruces de permanencia. Nos hubiese gustado estar más cerca de pelear cruces, pero no ha podido ser.

¿Cuáles crees que son los puntos fuertes de tu equipo?

Como he dicho antes, somos un grupo muy heterogéneo, donde los de segundo año deben de actuar como “hermanos mayores” de los de primer año. Esto no es fácil de asumir a estas edades, pero es el reto si queremos ser un equipo. La mayor cualidad de los 2005 es que son luchadores, cabezones y que no se rinden y este es el camino por el que tienen que llevar al resto. A partir de ahí, es tarea mía y de Edu hacerles jugar buen basket y hacerles entender que hay que hacer las cosas con intensidad, pero bien hechas, que este deporte es de listos/as.

Como entrenador, ¿cuál es tu principal reto esta temporada con este grupo?

Lo primero, resituarme en el baloncesto provincial, y además junior, después de haber estado las últimas temporadas en categorías  Nacionales y FEB. Me toca actualizarme y resituarme. He llevado muchos años junior, es una categoría que me gusta mucho, pero es cierto que he tenido que autoajustar muchas cosas, adaptarme a los jugadores, sus realidades y ponerme en su piel.

A partir de ahí, el principal reto viene derivado de la heterogeneidad del grupo, con niveles muy diferenciados y con los problemas que ello supone en el día a día. La búsqueda de este equilibrio es lo que hace, o no, que llegues a buen puerto. Los dos primeros meses han sido muy intensos, de vaciarme y exigir muchas cosas en entrenos. Creo que me han odiado por momentos jaja, pero creo que estamos en el buen camino y cada vez nos entendemos mejor.

Así que contento (de momento) y disfrutando del camino. Ya les he dicho a los chavales que tenemos mucho margen de mejora, así que mi reto es demostrárselo.