[box]Importantes victorias para muchos de los nuestros. Fundamental para el Surne BB en sus aspiraciones de permanencia, también para el Zornotza ante un rival directo en la zona alta, doblete para el HGB Ausarta Barakaldo para meterse en zona noble, el Santurtzi se queda como líder en solitario y el Bidaideak que vence en una de las canchas más complicadas ante un rival con pedigrí.[/box]
SURNE BILBAO BASKET 80 – MONBUS 76
Tercera victoria del Surne Bilbao Basket y son de esas que tienen un valor triple: el triunfo en sí mismo, hacerlo ante un rival directo y por lo que significa de confirmar el trabajo que se está haciendo y la trayectoria ascendente del equipo. Y se ganó sufriendo. Mal inicio bizkaino que no encontró la manera de frenar al visitante Robertson. De ahí el 2-11 inicial. Se intentó engancharse al aprtido pero no fluía el ataque bilbaíno y entre Filipovity y Birutis mandaron el +11 para los gallegos. Reaccionaron bien los de Alex Mumbrú liderados por Hakanson, el choque se igualó, y así siguió hasta que Bigote anotó el triple a 27 segundos del final que daría el triunfo a los MIB.
ZORNOTZA 85 – PONFERRADA 82
Primer cuarto muy igualado con Salazar regresando a las canchas tras su lesión de tobillo, y en el segundo parcial continuó la tónica de igualdad en la que dos detalles, pérdida de Gagic y otro error no forzado en un saque de fondo hicieron que la balanza se inclinara del lado leonés al descanso, 40-44. En la reanudación el Zornotza, se aplicó en defensa, Cremo anotó e hizo anotar a los suyos, y en los 3 últimos minutos del tercer período el parcial de 12-0 con triples de Mendia y Cremo incluidos dejaron el 68-58 en el luminoso para afrontar el último cuarto.
Administró bien la renta el equipo de Mikel Garitaonandia pese al empuje del Ponferrada, gracias en gran parte a las buenas decisiones de Oier Ardanza con 9 puntos prácticamente consecutivos en momentos clave que pusieron muy de cara el triunfo a los zornotzarras. Pese a todo, el Ponferrada dispuso del balón y el triple para forzar la prórroga pero erró el lanzamiento el base visitante Manchon.
GDKO IBAIZABAL 59 – CORTEGADA 72
El GDKO Ibaizabal se vio muy pronto por detrás en el marcador ante un Cortegada que estuvo muy efectivo desde la línea de tres puntos y generó muchos con sus interiores. El 35-43 del descanso dio paso a un tercer período que se antojó decisivo con la pívot keniana Wanyama haciéndose fuerte en la pintura. Las diferencias llegaron a ser de hasta 21 puntos. Pero el GDKO sacó carácter con las canteranas Royale y Arenas de nuevo tirando del carro para recortar y acabar dando una imagen más competitiva, eso sí, sin opciones de pelear por el triunfo.
HGB AUSARTA BARAKALDO 67 – INSTITUTOS DE COMPOSTELA 35 Y HGB AUSARTA BARAKALDO 53 – CORTEGADA 48
Doble victoria para el HGB Ausarta Barakaldo en un fin de semana redondo para las fabriles. El sábado, en el encuentro correspondiente a la jornada, las de Alberto Cea no dieron ‘chance’ al equipo gallegos de Compostela con una salida en tromba con el trío Horford, Sengo y Johnson resolviendo en la zona y en el perímetro, que les llevó al 21-10. Controló la situación el Ausarta en el segundo tramo para asestarle el hachazo definitivo al choque en el tercer período con un parcial de 15-4 que le permitía a Cea pensar en los últimos minutos en el encuentro del domingo.
Y en la jornada dominical el HGB podía también con el Cortegada, eso sí, en un encuentro totalmente diferentes, equilibrado, con menos alegrías ofensivas, ambos equipos más erráticos en sus lanzamientos en general y en los triples en particular (1/15 el Barakaldo y 4/12 el Cortegada). Las de Lasesarre sí pudieron contener a su dupla interior Sedlakova y Wanyama, Sengo y Johnson daban la réplica y sólo generaba problemas una ex Liga Femenina como Sara Gómez. Las cortas rentas eran favorables a las bizkainas en el último tramo, siempre 3-5-7 puntos arriba. Horfors llevó la renta al +10 (45-35). Parecía definitorio pero Gómez emergió para meter presión hasta el 51-48 dentro del último minuto pero las gallegas no pudieron ir más allá y el importante triunfo se quedó en Barakaldo.
SANTURTZI 66 – VALLE DE EGÜES 56
El Santurtzi sigue líder y lo hizo tras sumar una nueva victoria en un partido en el que empezó marcando el ritmo gracias a que los morados estaban generando puntos en los primeros segundos de la posesión, destacando en esos minutos Barandalla y Artiñano. El parcial de 16-9. Giró el choque hacia otros derroteros en el segundo tramo, se endureció el partido, emergió el perímetro visitante con Lacunza en escena y se apretó el marcador al 25-22. Consiguió retomar el control el Santurtzi pero con menos contundencia. Al descanso, 33-28. Los navarros volvieron fuertes al choque con parcial de 0-4 que reducía las diferencias a la mínima expresión pero los morados volvieron a marcar el ritmo dominando por dentro. Y con esa dinámica de correr y dominar el rebote, el Santurtzi desmontó las intenciones visitantes, 57-41, para acabar venciendo con cierta tranquilidad.
CANTBASKET 84 – GETXO ST 66
Esta vez no pudo ser. El Getxo visitaba a uno de los equipos fuertes de la competición y nunca estuvieron cómodos los aurinegros. Los de Imanol Adán suelen construir mucho desde la defensa y no fue el día: anotaron mucho desde el perímetro los locales, buen trabajo de Asier González en un día en el que le faltó el complemento de Joseba Iglesias y el apagón ofensivo del tercer cuarto acabó de minar las opciones de triunfo getxotarras.
BASKONIA 87 – LEIOA SBT 48
A priori era una complicada salida y efectivamente los leioztarras no pudieron competir ante la supremacía física del Baskonia. Desde el primer cuarto por detrás en el marcador y el Leioa que sólo se encontró cómodo en el tercer asalto, pero insuficiente para recortar la distancia. Los baskonistas pusieron la directa en el último cuarto.
ILUNION 67 – BIDAIDEAK BILBAO BSR 71
El partido comenzó de la peor de las maneras para ambos contendientes. Los bizkainos sin poder contar con el líder constructor de su juego, Asier García, que arrastra problemas musculares heredados de la larguísima temporada pasada -Paralímpicos incluidos- y los madrileños desprovistos de su pólvora habitual. Ni Bywater -tal vez el mejor lanzador en la historia de la competición-, ni Warburton, ni Latham eran capaces de encontrar el aro rival, lo que se muestra al observar sus penosas estadísticas del primer parcial con un 23% de acierto en tiros de campo y el que no pasaran de 9 puntos en estos 10 minutos. Claro que los de Adrián Yáñez no estaban por aprovechar tanto desacierto, y con similares ratios, apenas si llevaron a 10 el luminoso en ese tiempo. Tablas en cicatería de rendimiento entre dos equipos llamados a lo contrario.
Apenas mejoraron las prestaciones los de Ilunion durante el segundo parcial, pero no así Bidaideak. Catapultado por el acierto de David Mouriz y mejorando su ritmo e intensidad en las otras facetas determinantes del juego – rebotes, transiciones, defensa…- , los bilbaínos fueron abriendo su marcador hasta poner sus guarismos en términos razonables para con su potencial. Al descanso, llegaron con un 23 a 36 que les daba aire y parecía restaurar confianzas.
Pero era claro que en algún momento tenían que resurgir los madrileños. Y fue en el tercer parcial cuando les llegó su momento mas dulce. Ajustaron el tiro, mejoraron porcentajes, apretaron en defensa y ahondaron mejor a sus hombres altos en la zona bilbaína, y así tomaron el liderazgo del parqué. El del marcador no lo consiguieron aunque se acercaron a ello también a falta de 1 minuto, con un 41 a 42. Fueron 20 los puntos que sumaron en esos 10 minutos en tanto que solo concedieron 11.
Con un 43 a 47 que señalaba por si sólo que las fuerzas estaban en equilibrio y el partido completamente abierto, se encaraba el ultimo de los parciales. Con Mouriz, Txema, Mariana, Jasso y Asier en cancha se encomendaban los bilbaínos para hacer valer si quiera esa ventaja.
Los madrileños se pusieron a 2 en algunas fases de este último tiempo – la última en el minuto 39- pero no pudieron jamás si quiera equilibrarlo. El toma y daca fue continuo durante todo el mismo y a cada acción de los artilleros de Ilunion, le devolvían los vascos su mejor hacer sobre la pintura. Asier alimentaba a Txema y Jasso, también a David, y con sus aciertos les impedían girar el marcador. Las faltas personales condicionaron los últimos minutos de ambos equipos, pero los bilbaínos supieron tramitar de mejor manera la ansiedad propia de los finales de partido apretados y, con una intensidad defensiva propia de sus mejores momentos, pudieron sancionar a su favor un encuentro en el que, pese a las bajas prestaciones del primer compás, en justicia se decantó para los del Botxo.
